No es un secreto que muchas personas tienen flores en su casa solo para decorar y agregar color al espacio, sin ver más allá de esto, e ignorando todas las connotaciones y el poder que las flores puedan tener. Los colores preferidos suelen ser los más vivos, pero más allá de ser un elemento decorativo, las flores tienen un significado. Ven y descubre el significado de las flores naranjas.
Las flores naranjas son unas de las preferidas para decorar, pero más que tener una función ornamental, la diversidad de flores naranjas conforman un mundo lleno de simbolismo que merece ser conocido.
Cada flor tiene también un impacto psicológico en nuestra manera de ser; cuando llevamos una flor hasta un espacio de nuestra casa, también estamos atrayendo ciertas cosas a nuestra vida y esto depende de todos sus elementos, incluyendo la forma, su historia y, por supuesto, el color.
Quienes conocen sobre el lenguaje de las flores saben que el tono naranja debe ser escogido cuidadosamente, ya que para muchas personas los efectos no son siempre los más deseados. Es importante que las flores que hemos escogido estén en consonancia con nuestra personalidad y que podamos soportar toda la carga emocional que implica.
Por ejemplo, muchas veces el tono naranja suele despertar mortificaciones, preocupaciones o agobio ante ciertas circunstancias, por lo que, sí te encuentras viviendo algunas situaciones complejas y sufres o tienes problemas de los nervios, lo mejor sería escoger un tono más tranquilizador como el azul, quizás.
Más allá de los efectos que tiene el naranja en nosotros, regalar una flor con este color lleno de vida también tiene otros significados positivos.
Por ejemplo, si un ser querido se encuentra viviendo alguna situación que es fuerte y siente soledad, regalar unas flores en tono naranja es una gran opción, dado que significa darle apoyo y hacérselo saber por medio de estas flores.
El significado de las flores naranjas también está asociado con el buen humor. Son excelentes para regalar a personas que son alegres, que siempre tienen buena disposición de ánimo y que sabemos que tienen una personalidad fuerte y enérgica. Si esta persona ha contribuido con nuestra felicidad, o nos ayudó a salir de algún momento que parecía oscuro, regalarle unas flores naranjas es el mejor modo para decirle “gracias”.
Las flores naranjas significan vida. Si teníamos una relación sentimental que creíamos que había acabado, o que ya estaba en sus últimos días, pero de repente se ha avivado, las flores naranjas son un gran detalle que el ser amado sabrá apreciar, y con ello también reforzaremos los lazos de nuestro amor, permitiendo que este resurja en cada momento.
Gracias a la vivacidad de la flor naranja, estas pueden ser obsequiadas también cuando sentimos que somos felices junto a una persona, bien sea que se trate de una pareja, un amigo, o algún pariente con quien tengamos gran afinidad.
Algunas de las flores naranjas con significados hermosos, son las siguientes:
-Los tulipanes naranjas: es posible encontrar muchos colores entre la variedad de los tulipanes, sin embargo, uno de los que más cautivan son los naranjas precisamente porque transmiten alegría y nos hacen sentir enérgicos. Si tenemos los ánimos caídos, tener un tulipán naranja cerca de nosotros es lo mejor que podemos hacer para comenzar a sanar.
Los tulipanes naranjas significan optimismo y positividad ante los hechos de la vida. También nos permiten entrar en conexión con otras personas. Son ideales para parejas que se aman y están viviendo la etapa de la euforia y el enamoramiento en su máxima expresión. No hay amor que se resista a un tulipán color naranja.
Si sabemos de una persona que no se encuentra bien de salud, a nivel físico o emocional, obsequiarle tulipanes naranjas le ayudará a sentirse mejor prontamente. Quienes padecen cuadros depresivos recurrentes pueden crear la costumbre de tener tulipanes naranjas en espacios de la casa para superar con más rapidez la tristeza.
Si sabemos o sospechamos que se avecinan tiempos difíciles, que podemos estar prontos a vivir una ruptura amorosa, el desenlace de una amistad que debe terminar, una prueba académica de la cual no estamos seguros de haber aprobado, o que estamos cerca de recibir una noticia desagradable, podemos ambientar con antelación nuestro hogar con varios tulipanes naranjas en distintos puntos de la casa.
De esta manera lograremos que, cuando el momento poco deseado llegue, los eventos nos afecten menos, o que tengan menos poder para derrumbarnos anímicamente.
Los tulipanes naranjas también se les pueden regalar a parejas que acaban de comprometerse, y significan que les deseamos el mejor de los éxitos y la mayor felicidad en su unión.
Los amantes que comparten la felicidad de estar unidos en secreto también se hacen este tipo de regalos con frecuencia. Las flores que prefieren mayormente son los tulipanes naranjas.
Algunas veces, las personas regalan lirios naranjas, pero esto es por desconocimiento o por confusión. Los lirios naranjas no siempre transmiten amor ni alegría, sino que pueden significar que hay un asunto emocional que está pendiente, que no se ha resuelto, y por tanto, podemos decirle a la otra persona que sentimos rabia o resentimiento que no hemos perdonado. Esta flor en su tonalidad naranja es mejor evitarla como obsequios a personas que amamos o estimamos mucho.
Una de las flores naranjas que son muy apreciadas son los jazmines, aun cuando estas sean trepadoras o venenosas. Suelen embellecer los espacios, y son muy queridas por el género femenino. Si un joven quiere enviarle un mensaje a una dama y transmitirle, por medio del lenguaje de las flores, que atesora su belleza, un jazmín en tonalidad naranja es una buena elección.
Aunque estas flores en color naranja sean consideradas muchas veces como escandalosas, lo cierto es que transmiten la alegría que necesitamos en muchos momentos de nuestra vida. Rodearnos del aura de entusiasmo y vitalidad que irradian las flores naranjas siempre nos traerá beneficios.
Si deseas vivir con júbilo y gozo, no desestimes el poder del significado de las flores naranjas en nuestra realidad.